El miércoles de ceniza es una fecha muy especial e importante porque es el inicio de un tiempo fundamental para el cristiano católico, tiempo de penitencia, la gran fiesta para conmemorar la muerte y resurrección de Jesús. Desde el siglo XI, la Iglesia de Roma acostumbra poner las cenizas al iniciar los 40 días de penitencia y conversión. “Es un rito al que acuden los creyentes de forma masiva y se ha convertido en una acción litúrgica muy popular”, así lo manifestó el Misionero Claretiano José Antonio Santana, párroco de la iglesia Corazón de María en Los Curos, Mérida. La iglesia quiere recordar que los seres humanos son un don de Dios, que siendo materia, y proclive a que se estropee con el tiempo, la iglesia quiere aprovechar este día para que nos demos cuenta que somos polvo y poco a poco nos reducimos. “Procuremos ser hijos de Dios en plenitud, permitiendo que aparezca una creatura nueva”, manifestó el padre Santana. Es por eso que al momento de imponer la ceniza a cada persona, el sacerdote dice: “Conviértete y cree en el Evangelio”. La ceniza en la frente o sobre la cabeza, debe ser el recordatorio de que, con nuestras buenas obras, resucitaremos a la vida eterna con Jesús. Equivocadamente, parte de la feligresía le da un sentido mágico a la ceniza, que por supuesto no tiene. El padre Santana explica que “lo que hace valiosa a la ceniza, son las ganas sinceras de querer ser mejores, es la actitud de oración que acompaña a esa forma externa de comprender lo que se está realizando, la ceniza nos representa y nos recuerda que algún día vamos a morir y nuestro cuerpo volverá a ser polvo, por esa razón debemos orar antes y durante la imposición de este símbolo, pidiendo a Dios nos conceda el espíritu de la penitencia que a su vez invita a compartir” dijo. De lo pagano a lo sagrado Los días de carnaval, se celebran justamente antes del inicio de la Cuaresma. Carnaval significa “quitar la carne”, es decir, que se prohíbe consumir carne durante cuarenta días. En la edad media, se aprovechaba el Carnaval para hacer comilonas y así entrar entonces en el tiempo del arrepentimiento, el perdón y la reconciliación. La práctica del Carnaval es una fiesta pagana, llena de excesos, abusos y descontrol. El miércoles de ceniza y el viernes santo son días de ayuno y abstinencia. La abstinencia obliga a partir de los 14 años y el ayuno de los 18 hasta los 59 años. Este es un modo de pedirle perdón a Dios por haberlo ofendido y decirle que queremos cambiar de vida para agradarlo siempre. Cuaresma 2017 La Campaña Cuaresmal o Compartir de este año desde Caritas Venezuela, lleva por nombre “Ollas Comunitarias… Aún queda mucho por hacer” e invita a todos los católicos a compartir su ayuno y conseguir alimento para ofrecer a los hermanos más necesitados, reconociendo que hay personas en peor situación. “Seguramente tus dificultades son menos penosas, porque vas consiguiendo tu comida, entonces prívate un poco de esos alimentos, pero hazlo con sentido cristiano, para que otros puedan comer, la solidaridad no se puede apartar de nuestro corazón,”, recomienda el padre Santana. También, invita a orar y hacer actos de penitencia, absteniéndose de aquello que gusta mucho, como por ejemplo el ver televisión en demasía, permanecer por largas horas frente al internet o dispositivos móviles y más. El ayuno debe ser de todo lo que agrada al cuerpo y que, por exceso, se puede convertir en vicio. Ayunar también es un acto de compasión hacia los demás. Arelis Chacón CNP: 16687
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LITURGIARenovar la práctica celebrativa a través de una profundización permanente de los aspectos bíblicos y teológicos, de una adecuada inculturación de los textos y los gestos, de un convincente sentido celebrativo y festivo, de una contextualización en la realidad, de una participación más activa del laicado y un real impacto en la vida de las personas y en la asamblea litúrgica. Hacer seguimiento y acompañamiento a las expresiones religiosas propias de este ambiente cultural Categorías |