Esta liturgia de inicio y preparación inmediata a la celebración de las misas de aguinaldos, rememora el momento en que María y José buscaban un lugar donde alojarse pues había llegado la hora del alumbramiento. En los momentos previos a la Navidad, la dinámica del dolor-alegría se hace particularmente presente en el pesebre con el nacimiento de Jesús: dolor por no hallar posada para recibir aunque sea con humano decoro al señor de los señores, y la alegría de la hora cercana de la Natividad. este contraste lo veremos en toda la actividad y ministerio de Jesús Se trata pues, de tomar conciencia de este dinamismo presente en la espera y en el ministerio de la Natividad y de vivirlo en comunión con María y con José en estos días previos al nacimiento del Señor Jesús y de este modo prepararnos para acoger activamente la Palabra reconciliadora. Durante el recorrido se hacen algunos versos, cantos y pregones que muestran la manera como muchos no acogen a José y María, pero finalmente ellos encunetran un lugar en un pesebre para que Jesús pueda nacer.
La actividad fue animada y cantada por el Conjunto de Aguinaldos "Los Navideños". La representación del pesebre viviente estuvo a cargo de algunos jóvenes de la experiencia juvenil Ancla. (Agradecemos a María Elena Rangel sus fotografías y los comentarios compartidos en esta publicación)
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LITURGIARenovar la práctica celebrativa a través de una profundización permanente de los aspectos bíblicos y teológicos, de una adecuada inculturación de los textos y los gestos, de un convincente sentido celebrativo y festivo, de una contextualización en la realidad, de una participación más activa del laicado y un real impacto en la vida de las personas y en la asamblea litúrgica. Hacer seguimiento y acompañamiento a las expresiones religiosas propias de este ambiente cultural Categorías |